Lágrimas de San Lorenzo
En
vano San Lorenzo
llora unos robinsones que se embarcan
prófugos de la ley y la miseria.
Sus vidas naufragaron en su origen
por nacer en la parte equivocada
de un mundo en el que la felicidad
es un bien que no está bien repartido
y sobre un cascarón de caucho buscan
esa otra orilla donde la pobreza
siempre es mal recibida.
Lo malo de un cadáver sin papeles
es que ensucia la costa y la conciencia.
En su rostro se puede adivinar la persona
y el miedo como el más universal
de los lenguajes.
El hombre no pensó cuando inventó
las fronteras que el cielo
a nadie pertenece.
En vano San Lorenzo llora porque
las estrellas no son
las mismas para todos.